El empaque de un producto tiene la función de guardar, proteger y facilitar el transporte, adaptándose al tamaño, peso y forma, puede ser una caja de cartón, un envase de plástico, embalaje de metal, de madera, etc.
Las empresas exitosas, logran darle un valor intrínseco al empaque junto con el producto, no lo tratan como un simple empaque que proteja sus productos y facilite su transporte, sino pasa a ser parte integral de la marca al hacerse uno con el producto y lograr que el producto mismo sea reconocido por su empaque a simple vista.
El arte del diseño de un empaque
Un claro ejemplo es lo que consiguió la compañía Apple con el empaque de sus productos, específicamente con el del Iphone, Apple se ha caracterizado por ser reconocida por su tradicional logo de la manzana mordida, este logo lo presentan en las cajas de sus productos lo que genera que los consumidores se interesen antes de ver el producto en sí.
Otro ejemplo es Sony con su caja de cartón del Play Station 5, con el desarrollo de un diseño elegante y sobrio, logran que los consumidores tengan una experiencia y reconozcan que tipo de consola lleva dentro, deseando comprar el producto.
Lograr que el diseño del empaque sea un diferenciador de ser un producto exitoso o no, no es tarea fácil, se debe de realizar una estrategia para desarrollarlo, sin embargo, si se logra, consigues que los clientes sean leales a tu marca porque les gusta la experiencia que viven al identificar el empaque.